10 de enero de 2020

Claritza Arlenet Peña Zerpa
Caracas-Venezuela
Comunidad de Educadores de la Red de Docentes IB
Las maestras venezolanas mostradas en la prensa de los años 1905-1906 suelen ser identificadas por su estado civil como carta de presentación. Aparecen en la prensa de aquel momento y en medio de una transición de un país agrario a otro arraigado a ideas positivistas. Considerando este contexto, la autora las siguientes interrogantes: ¿cómo se vestían las maestras? ¿se identifican características diferenciadoras respecto a la moda femenina de aquel momento?

Introducción

Para las mujeres sofisticadas vestirse era cuestión de destacar sus rasgos femeninos, silueta y la belleza. La cintura era una de las partes del cuerpo para resaltar. Así que las señoras se servían de una prenda: el corsé1 . Ofrecidos en la prensa por medio de avisos “Leoty 2” donde se informaba los sitios de venta. Como se advierte, el nombre era de origen parisino. Aparecido, según las fotografías encontradas en la prensa nacional, a finales de la década de 1890. Se destaca lo higiénico y la perfección de sus modelos. 

Este gusto por las tendencias europeas calaron en algunas féminas, directoras de Institutos de piano y canto del Estado Carabobo, por ejemplo. La señorita Rosa Torres Billier, retratada en el año 1905 en El Cojo Ilustrado con su grupo de alumnas, se presenta como fiel seguidora de la moda. Su vestido está ceñido a la cintura y con abundantes encajes en la parte alta. Se le observa al frente de la columna de blanco con el cabello recogido. 


Fotografía 1. Instituto de piano y canto del estado Carabobo. Tomada de ElCojoIlustrado

Ser directora de un instituto de este tipo era distinto a ser maestra de aula. Dos claros roles. No toda la población tenía la opción de estudiar música. Si bien, había grandes maestros, algunos padres preferían que sus hijos estudiaran fuera del país. Además de esta diferencia, en términos de ambientes de aprendizaje, se encuentra los grupos destinatarios. La señorita Torres Billier tenía solo niñas, quienes también lucían espléndidas con finos vestidos y adornos en sus cabellos. 

Tener un piano o pianola en el país se traducía en tener poder adquisitivo 3. Quienes lo poseían lo compraban a las compañías de New York, París, Londres y Berlin. Ya para 1910 en El Cojo Ilustrado aparecía un aviso de una lista de compradores. Gobernaba en el país el General Juan Vicente Gómez. Él y un grupo de Generales, Doctores y Señores (élites) aparecían en dicha lista.

Vestidos de las maestras ¿elegancia o comodidad?

Una de las fotos de las alumnas del Colegio Castro (Cumaná-Venezuela), publicada en las redes sociales virtuales de El Cojo Ilustrado, muestra un vestido ligero y de color neutro. Largo y discreto. Los cabellos con cintas y debidamente recogidos y zapatos cerrados. Algunas de las jóvenes tienen un sombrero. En la nota de prensa que acompaña la foto se lee: “Testimonio vivo son estas diez señoritas4 graduadas de la labor fecunda, que con el noble magisterio de la enseñanza...” (Tomado de la cuenta de twitter @CojoIlustrado publicada el día 7 de octubre de 2019). Indica el año 1906 como la fecha5 .

Acercarse a la fotografía de las diez maestras ofrece otros detalles. Los rostros de las jóvenes mostraban serenidad. No se advertían sonrisas, sin embargo, se notaba una disposición y orgullo de posar ante una cámara. Aquellas mujeres no pertenecían a familias poderosas, estudiaban para formar a los más pequeños y tenían dentro de sus opciones ingresar a la carrera docente en una ciudad distinta a la capital (Caracas). 

Sus trajes no se acercaban a los vestidos de las damas de alta sociedad (muy al estilo parisino ni con pieles). La educación aún arraigada al catolicismo sigue diligentemente las prácticas de las buenas costumbres. No se exhibía ninguna parte del cuerpo femenino y se mostraban objetos religiosos (collares).


Fotografía 2. Estudiantes del Colegio Castro.
Imagen tomada de El Cojo Ilustrado.

 

Había una influencia importante de Europa, visiblemente notable en los detalles de los vestidos. Los cuellos altos eran comunes en todas las señoritas, así como las mangas de farol las cuales “no reducen su volumen y apenas si se modifican, estrechándolas un poco más, del codo a la muñeca” (Tomado de la Página para Damas de Josefa Pujol 6, El Cojo Ilustrado, mayo 1896).

A los argumentos esgrimidos por los detractores del uso del corsé, relacionados con la higiene, se debe considerar que al no formar parte de la vestimenta de las maestras garantizaban, en términos de confort, la posibilidad de trabajar con niños y niñas sin complicaciones respecto al desplazamiento en el aula.

Cumaná es una de las ciudades costeras del país. Así que el color blanco favorecía la comodidad de su uso. Se advierte la característica ambiental como un componente importante del traje.

Además, los zapatos cerrados y negros, representan una muestra del desarrollo de la industria de la zapatería en el país (señalada por el periódico El Cojo Ilustrado para el año 1897).

Referencias
El Cojo Ilustrado. Pianola y Pianos 1910. Tweet publicado el 30 de diciembre de 2019.
_____________ Grupo de señoritas graduadas de Maestras Elementales en el Colegio Castro. 7 de octubre de 2019.
Pasalodos, Mercedes. Corsés 1900-1905. Disponible en: http://www.culturaydeporte.gob.es/mtraje/dam/jcr:f4dfa621-e8bd-4ea7-9d28-6e0e8de378a9/09-2008.pdf

 

1  “Desde el punto de vista de la belleza femenina, el corsé debía cumplir tres condiciones: dibujar las líneas ondulantes del torso, reducir el vientre y no impedir los movimientos del busto” (Pasalodos, p. 4)

2  Reconocida por su taller, apareció en las revistas de moda. Su hijo también heredaría esta afición por el diseño Ernest Leot.

3  Los precios oscilaban entre 1500 Bs a 6800 Bs. Ofrecidos bajo la modalidad de pago por cuotas de 200 Bs.

4  Para la época era común la existencia de la chaperona, mujer de más edad encargada de cuidar y acompañar a las jóvenes mujeres en sus salidas (llámese fiesta, iglesias...). Llama la atención el término “señoritas” nuevamente resaltado en el periódico para referirse a las mujeres solteras sin hijos. Las madres solteras eran objeto de escarnio. Incluso en las primeras escuelas de niñas en el registro de las matrículas se le indicaba si era o no hija natural.

5 Dos años después llega al poder Juan Vicente Gómez, uno de los presidentes responsables de colar el positivismo gracias a reconocidos científicos de la época.

6  Periodista española. Representó la ventana a Europa en materia de moda y costumbres de la mujer. Introdujo a través de las páginas escritas para El Cojo Ilustrado la cultura femenina. Muere en el año 1904. Abundantes trabajos la mencionan como una de las escritoras españolas, otras webs rescatan extractos de sus escritos. El lector interesado puede ver la Hemoroteca digital de la UNAM. Disponible en: http://www.hndm.unam.mx/consulta/publicacion/visualizar/558075bd7d1e63c9fea1a0fc?intPagina=10&tipo=publicacion&anio=1885&mes=08&dia=09